Soy la Anciana

He vivido mi vida intensamente.

Cada paso de mi caminar ha sido un reto que yo he convertido en desgracia o oportunidad.

El sufrimiento siempre piso mis talones, pues es parte de la vida, pero yo aprendí a no elegirlo.

No fue algo instantáneo, me tomo muchos años comprender que de poco servían mis berrinches infantiles. Que si quería superar algo debía encararlo y abrazarlo, esa es la manera de sanar.

Los años me enseñaron también a valorar el tesoro irrepetible de un instante. A pronunciar palabras en silencio y a vivir en presente lejos de un planeado futuro incierto.

Ame y odie, aprendi que cuando me llene de ira me dañe a mi misma y que el bálsamo por excelencia para el alma es pedir perdón.

Aprendi a agradecer por todo y por todos. Y que cuando comulgo con lo sagrado me encuentro con mi verdadero yo.

Hoy tengo 3 consejos para ti:

1- Se compasivo, nunca dañes a nadie porque todo es parte de ti.

2- Alimenta siempre el amor, pues esta es tu arma mas poderosa.

3- Elige el camino que te de paz interior, pues quien elige un camino con corazón podrá mirar atrás al final de sus días y sonreír, así como lo hago yo.

Adaísa🌿

[Texto escrito invocando y verbalizando la energía del Arquetipo de la Anciana]

Ilustración: Isabel Bryna